Podemos definir bruxismo cuando se aprietan los dientes (más frecuentemente durante la noche) y se sufren entre otras molestias al despertarse, cefaleas y dolor mandibular.
Incluso en algunos casos, se puede llegar a la rotura de piezas dentales debido al desgaste provocado.
Adicionalmente, suele presentarse una mala calidad del sueño y cansancio al levantarse por la mañana.
El bruxismo tiene un origen muy variado que puede ir desde factores genéticos, neurofisiológicos o emocionales, estando muy frecuentemente asociado con situaciones de estrés y/o ansiedad.
Los tratamientos más frecuentemente utilizados, entre otros, son las férulas de descarga si bien no constituyen una solución totalmente eficaz y definitiva, ya que no resuelve la patología en sí.
La auriculoterapia ha demostrado su eficacia en el tratamiento del bruxismo, disminuyendo la contracción del músculo temporal, reduciendo de este modo, el dolor temporal y mandibular, así como los niveles de ansiedad, todo ello objetivado mediante electromiografía.
Más información:
Denise H et al. Role of Auriculotherapy in the Treatment of Temporomandibular Disorders with Anxiety in University Students. Evid Based Complement Alternat Med. 2015; 2015: 430143.